“Trabajar con Otter es una oportunidad de intercambio de informaciones y Know How para seguir creciendo en un mercado tan competitivo como el food delivery”.

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Dos italianos, una idea de negocio disruptiva y mucho rosa: estos son los tres ingredientes clave de PizzaClik, una pizzería valenciana que no se parece en nada a lo que ya conoces. Hoy Alessio y Giovanni, fundadores del proyecto, nos cuentan cómo ha sido crear una marca de restauración para las nuevas generaciones y cuál es el rol de Otter en la gestión de su servicio de entrega a domicilio.

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Un e-commerce de pizza nacido en plena pandemia

Alessio y Giovanni son dos jóvenes italianos con perfiles muy diferentes. Alessio pasó por el mundo de la consultoría y el ambiente startup antes de fundar una agencia digital de marketing para restaurantes. Giovanni ya tenía dos bares en Sicilia, pero su verdadera pasión estaba en la creación de marcas.

En la búsqueda de hacer algo distinto surgió la idea de PizzaClik, pero la llegada de la pandemia sacudió todos sus planes. “Llegó marzo y se nos cayeron todos los inversores, todos”, cuenta Alessio. Como buenos emprendedores, ambos son especialistas en ver oportunidades donde otros ven problemas. “Al final fue, entre comillas, una suerte porque aceleró mucho el mercado en el que nos estábamos metiendo”. Así, a finales de 2020 y aún lidiando con fuertes restricciones en el sector de la hostelería, nace PizzaClik como un e-commerce de pizza.

Inicialmente, PizzaClik era una dark kitchen o cocina fantasma: un concepto totalmente digital con la misión de entregar pizza como recién salida del horno. Los primeros meses les permitieron probar el modelo de negocio, recopilar datos y conocer a fondo el mercado. “Por suerte funcionó, pero vimos que necesitábamos hacer algo diferente, algo más rompedor”. Con seis meses de aprendizaje bajo la manga, Alessio y Giovanni deciden lanzar un nuevo concepto de PizzaClik: nueva imagen de marca, nuevos restaurantes físicos y mucho rosa.

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La pizza como herramienta de comunicación

“En la hostelería existe esa costumbre de comunicar únicamente sobre el producto. Para nosotros el producto no es el punto central, sino una herramienta para comunicar nuestros valores y conectar con las personas”.

Basta echarle un vistazo a la presencia online de PizzaClik para entender que son diferentes. “Una startup nacida en Valencia hecha por gente rara”, como ellos mismos se definen en su perfil de LinkedIn. La página web de PizzaClik es rosa, llena de fotografías de producto divertidas y un diseño que no recuerda para nada a una página de pedidos tradicional. “Si no tienes pasta para pedir hay 2 opciones: elegir entre estos packs o jugar al juego del calamar”, reza la introducción de sus menús con nombres igual de ocurrentes como “alma de rata”, “alma roñosa” o “alma tacaña”.

“En la hostelería existe esa costumbre de comunicar únicamente sobre el producto”, dice Giovanni. “Para nosotros el producto no es el punto central, sino una herramienta para comunicar nuestros valores y conectar con las personas”. Elementos como el color rosa fueron seleccionados intencionalmente para crear una identidad de marca fuerte y memorable. “Estamos muy centrados en que la experiencia sea algo diferente, algo que se te quede”.

Esta experiencia trasciende más allá de lo digital. El packaging de PizzaClik (también rosa) es otra de las extensiones de su personalidad. Frases divertidas, cajas de acompañantes que parecen paquetes de cigarrillos e incluso una que otra notificación de Hacienda para asustar a sus clientes en Halloween. PizzaClik entiende que la competencia en las plataformas de delivery es feroz, por lo que es necesario diferenciarse con experiencias inolvidables.

Cuando Just Eat no les permitió usar su logo en las fotos de producto, lo cambiaron por el mensaje “aquí nos habría gustado poner el logo”. Cuando llegó el día de entregar la creatividad a su proveedor de servilletas perfumadas y no tenían la idea lista, imprimieron “queríamos poner algo interesante, pero ese día no nos sentíamos muy inspirados”. Cuando las bolsas rosas les salían muy caras, usaron una marrón aclarando que con ello se ahorraban un montón de pasta. “Al final este tipo de comunicación directa al cliente le mola un montón”, dice Giovanni. “El cliente quiere que tengas un diálogo con él, crear una relación”.

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Una pizza a 82 grados y en pocos minutos

“Si apuntas al delivery, es impensable trabajar únicamente con tu canal propio. Hoy en día las plataformas mandan en este sector y puedes aprovecharte de esta visibilidad para llevar gente a tu canal”.

Que la marca disruptiva no os engañe, PizzaClik tiene otro as bajo la manga: la logística. Al haber nacido como un e-commerce, Alessio y Giovanni se han vuelto expertos en entender qué busca un cliente al pedir comida online. Su página web está diseñada para hacer la compra en 3 clics y su proceso de cocción les permite hornear la pizza en solo 5 minutos. También se encargan ellos mismos del reparto a domicilio en 21 áreas de Valencia para asegurarse de que la pizza llega a casa a 82 grados, como recién salida del horno.

Además de su página web, PizzaClik está presente en Glovo, Uber Eats y Just Eat. “Si apuntas al delivery, es impensable trabajar únicamente con tu canal propio”, dice Alessio. “Hoy en día las plataformas mandan en este sector y puedes aprovecharte de esta visibilidad para llevar gente a tu canal”.

El negocio del delivery se disparó a causa de la pandemia y, durante el confinamiento, 2,6 millones de españoles ordenaron comida a domicilio por primera vez. Sin embargo, a medida que el delivery crece, también lo hace el número de plataformas de entrega. Apps como Glovo, Uber Eats y Just Eat son las formas más populares de pedir comida a domicilio. “Donde está tu cliente tienes que estar sí o sí. Es una guerra que no existe”. La mayoría de los restaurantes buscan estar en más de una plataforma para aumentar sus ventas, pero esto significa gestionar pedidos, notificaciones, menús y datos a través de múltiples tablets.

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Entregando pizza, valores y diversión con Otter

“Cada plataforma tiene su forma de trabajar, cada una tiene su dashboard y necesitábamos un canal que limpiara estos datos y nos permitiese acelerar el proceso de evaluación para tomar decisiones de forma más rápida”.

“El delivery parece fácil, pero hasta las marcas más grandes tuvieron problemas para gestionarlo durante la pandemia”, cuenta Alessio. Para PizzaClik, comprender y seguir el desempeño del negocio a través de sus números era fundamental. “El delivery te da muchísimos datos, pero el tema es entender cuáles son los datos que necesitas para tomar decisiones. Allí nació la necesidad de Otter”.

Gracias a la herramienta de Informes de Otter, PizzaClik puede seguir los datos de todos sus servicios de delivery en un solo lugar. “Cada plataforma tiene su forma de trabajar, cada una tiene su dashboard y necesitábamos un canal que limpiara estos datos y nos permitiese acelerar el proceso de evaluación para tomar decisiones de forma más rápida”. La herramienta de Informes de Otter ofrece datos como ventas, pedidos perdidos y desempeño a través de plataformas y locaciones. “O controlas el delivery y estás dentro de unos números o puedes acabar trabajando gratis”, concluye Alessio.

Para PizzaClik, trabajar con Otter es “una oportunidad de intercambio de informaciones y Know How para seguir creciendo en un mercado tan competitivo como el food delivery”. “El delivery es un canal importante para nosotros”, dice Alessio, “pero al mismo tiempo es un mercado muy delicado y complejo, donde se necesitan muchos datos de calidad para poder tomar las decisiones adecuadas”.

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Cómo apoyar a PizzaClik

Si estás en Valencia, puedes apoyar a PizzaClik pidiendo comida a través de Glovo, Uber Eats, Just Eat o su sitio web. ¿Los platos favoritos de sus fundadores? Carboloca para Giovanni y pizza sin gluten para Alessio.

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